A CONTRACORRIENTE

Las cosas llegan cuando llegan, ese es el problema, o no. Seguramente pensamos que nos merecemos todo y más y en este momento, no mañana ni pasado y quizás tengas razón o no. La vida es como una vieja máquina de escribir, en la que debes ir pulsando teclas y su combinación da como resultado una palabra. Pues bien, cada tecla es una acción que realizas y la combinación de muchas acciones acaban produciendo un resultado, pero aquí lo complicado es acertar con la combinación de teclas, para obtener el resultado deseado. En ese momento no sabía la combinación y andaba golpeando teclas, sin obtener ningún resultado. Después de una larga noche sin dormir, reflexionando en la terraza, llamé al Padre Ángel para intentar despejar la mente. Se presentaba un duro día, tenía que aclarar lo ocurrido con Nadia y acto seguido presentarme en la redacción donde Sandoval, ya estaría al corriente de lo sucedido y seguramente no me esperaría para felicitarme. El Padre Ángel, había sido...