LA REDACCIÓN : PARTE 1

Había salido corriendo como casi siempre de la cafetería, mi margen de llegar tarde a la redacción, rayaba el límite y los diez minutos de trayecto se convertían en una prueba de obstáculos, no por la dificultad, si no más bien por todo tipo de personajes que me encontraba y a los cuales debía evitar para no entrenarme más, parecía que el destino me los ponía adrede para que no cumpliera con mi misión y la verdad es que lo conseguía. Hoy no era el caso, mi camino estaba despejado hasta la entrada del periódico. – Buenos días, Toni. – Un señor mayor, algo rechoncho que gobernaba el mostrador de recepción me reconoció. – Bueno días, Alberto ¿cómo tenemos la mañana? – Alberto, llevaba trabajando allí desde que pusieron las primeras piedras del edificio, así que era una autoridad y todo el mundo lo respetaba. Incluso yo. Más que ser el conserje del periódico, para mí era mi confidente, me ponía al día sobre todo lo que ocurría por aquellas plantas y pasillos. Yo como a cual...